Hacia un turismo responsable y sostenible

Baja California cuenta con una gran diversidad de atractivos naturales, una enorme riqueza cultural e histórica, una reconocida gastronomía a nivel mundial, así como una privilegiada ubicación geográfica y clima excepcional que motivan la visita de turismo nacional y extranjero.

En este contexto, como actividad económica, el turismo en Baja California genera recursos que fortalecen su economía regional y local, produciendo beneficios directos e indirectos a la población de las regiones de los diferentes destinos turísticos mediante la prestación de servicios que satisfacen las necesidades de los turistas y que son atraídos por nuestra oferta, por lo que la actividad turística debe ser analizada desde el punto de vista económico, pero también como un fenómeno social y cultural.

Lo que si debe de quedar claro, es que este sector utiliza, explota y necesita de los atractivos naturales y culturales de las diferentes regiones para llevar a cabo sus actividades, es decir de su patrimonio natural constituido por monumentos naturales, formaciones físicas y biológicas que se fueron desarrollando poco a poco a lo largo del tiempo por la naturaleza así como de su patrimonio cultural entendiendo a este como el conjunto de valores y de bienes tangibles e intangibles que constituyen la herencia de un grupo humano, que refuerzan emocionalmente el sentido de comunidad con una identidad propia y que son percibidos por otros como característicos de un lugar determinado. Este patrimonio cultural, es el producto de la creatividad humana que se hereda, se transmite, se modifica y optimiza de individuo a individuo y de generación a generación. Tratándose del legado que recibimos del pasado, que vivimos en el presente y que transmitiremos a las generaciones futuras.

Conservar el patrimonio natural y cultural con sus elementos tangibles e intangibles es el objetivo primordial de la sustentabilidad turística para poder consolidarse como un destino socialmente incluyente, ambientalmente responsable y económicamente justo.

Este patrimonio cultural,
es el producto de la
creatividad humana
que se hereda,
se transmite,
se modifica
y optimiza
de individuo a individuo y
de generación a generación.

Bajo esta premisa, el turismo en Baja California debe convertirse en un medio para el aprovechamiento, la conservación y la difusión patrimonial de los recursos naturales y culturales de una manera sustentable, asegurándolo para las generaciones presentes y futuras.

En la actualidad el uso y el abuso de los recursos y destinos turísticos presentan una realidad con grandes carencias en materia de abasto, saneamiento y tratamiento de aguas, gestión de residuos, conectividad, movilidad urbana, suelos y reservas territoriales y sobre todo de ordenamiento, por lo que el turismo tiene ante sí el enorme reto de la conservación y el uso sostenible del patrimonio cultural y natural para reducir los impactos ambientales, económicos y sociales.

El aumento de visitantes a Baja California ha llegado a constituir una de las actividades preponderantes de nuestro estado, por lo que esta actividad debe ser analizada con el propósito de mantener el rumbo y reorientar sus objetivos, a efecto de lograr un mejor desarrollo para la sociedad sin poner en riesgo el uso, el disfrute, la permanencia y la autenticidad de los bienes patrimoniales.

Por ultimo tenemos que resaltar la importancia de insistir en que las directrices para el desarrollo sostenible del turismo y las prácticas de gestión sostenible se aplican a todas las formas de turismo en todos los tipos de destinos, incluidos el turismo de masas y los diversos segmentos turísticos.

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